Peri se despertó bien temprano y ya contó e ilustró la noche de ayer.
Yo me desperté con mi problema digestivo en su pico máximo de la molestia (hasta ahora), así que estuve tirada todo el día, sin escribir esto. Pero a pedido de mi prima, que más que nada quería las fotos, y aunque ella no haya escrito nada al respecto, aquí va:
Yo me desperté con mi problema digestivo en su pico máximo de la molestia (hasta ahora), así que estuve tirada todo el día, sin escribir esto. Pero a pedido de mi prima, que más que nada quería las fotos, y aunque ella no haya escrito nada al respecto, aquí va:
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Esta vez fue el turno de Peri y Noe (ex Tarde de Té con Tortas), y por añadidura Lorena, que no tiene un blog propio, pero bien que lee los ajenos.
Mismo cine de la semana pasada. La película elegida: La joya de la familia (elegida por Peri y yo en nuestra salida anterior, porque amamos a Sarah-Jessica).
Por supuesto, Peri murió con los trajecitos diminutos de SJ y confesó que se babea con Luke Wilson.
Intentamos evitarlo a toda costa, pero no pudimos: terminamos moqueando y llorando con distintos niveles de intensidad (y yo preguntándome por qué no tengo un pañuelo encima todo el tiempo).
A la salida del cine quise retratar el momento, pero creo que no se ve la cara de desencajadas por la película, si no más bien la alegría de haber salido juntas. Eso sí: las lágrimas ameritaban algo fuerte. ¡Un whisky!, grité sin pensarlo, supongo que en alusión a Sir William, porque a mí no me gusta el whisky.
Rumbeamos por Santa Fe hasta Coronel Díaz, entramos a una pizzería muy fashion... y así estaban los precios. Como yo no tengo problemas en salir huyendo en esos casos, propuse a mis compañeras una pronta huída. Puedo pagar $15 por una jarra de cerveza artesanal, pero no por una de Quilmes...
Pero no encontrábamos un lugar lindo y accesible al bolsillo en las siguientes cuadras. Entonces Noe recordó ese lugar, La Peca, también conocido por Peri. Con un vago recuerdo de dónde quedaba, mi seguridad de que la calle que va en diagonal por esa zona es Gascón, y una medida de suerte, llegamos a buen puerto.
El asunto de la cantidad de porciones de los sanguchitos lo habrán leído en la versión Peri. Pero agrego mis fotos a la cuestión. Son lo suficientemente gráficas.
Y en cuanto a la parejita en su primera cita: por un lado me dio gracia como Noe los fichó en segundos, y sacó que era la primer cita porque estaban tomando gaseosas, él estaba muy peinadito, hablaban bajito y escuchándose... y si los mirabas un poco más, te dabas cuenta la cara de embobados que tenían. Por otro, me pregunto si habrán imaginado que terminarían saliendo en un par de blogs...
Para finalizar, una foto que tuve que trucar, porque yo salí con cara de estrellada, pero ellas salieron divinas...
