La extraño, eso sí. Y quién sabe si no agarro el auto (una vez que salga del mecánico, que tiene para rato) sólo para ir a darle un beso y un abrazo. O tal vez el tren, o el bondi.
Como fuera, ir este fin de semana iba a ser complicado, con el recambio de turistas a mitad de mes... ¿por qué justo tenía que vivir en una ciudad turística? En fin, algún defecto tenía que tener (jejejeje).
¡Pero como te quierooooooooooooooooooooooooooo, mujer! ¡Un beso y un abrazo por cada kilómetro que nos separa! ¡Que lo pases lindo!
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