Panyfiestas
sábado, febrero 18, 2006
Hace 27 años

No sé cuántos primeros encuentros con personas recuerdo. Pero de éste, a pesar de lo chiquita que era, me quedó la primera imagen de ella.

Mis hermanas, Eugenia y Celeste, y yo habíamos pasado unos días en la casa de mi abuela Zulema y mi tía Viviana.
Hacía un calor espantoso, no podía dormir. Entonces miraba por la ventana. Desde ahí se veía bien el Sanatorio Güemes, que estaba a un par de cuadras. Miraba esperando no sé qué, porque mi mamá no se iba a asomar para decirme que estaba todo bien y que me fuera a dormir.





















Hasta que un día nos llevaron a las tres al sanatorio. Nos quedamos en un pasillo y una enfermera la trajo en brazos (o, al menos, eso es lo que recuerdo). Era una bebita hermosa, cachetona, con la boquita cerrada como si te fuera a dar un beso y un rulito perfecto pegado en la frente.

Ahí estaba, la menor de las Antelo, la que siempre será mi hermanita, no importa cuántos años tenga.
María Rocío

¡¡¡FELIZ

CUMPLEAÑOS,

ROCHI!!!